AFP – Caracas, 19 de marzo de 2025-. Un hombre en Francia reconoce haber drogado, violado y filmado a unas 15 víctimas. Un hombre fue acusado de violación con sustancias luego de admitir que violó y filmó a unas quince víctimas, siguiendo un patrón similar al de Dominique Pelicot con su esposa Gisèle, un caso que se erigió en símbolo de la violencia machista en Francia y en el extranjero.
Bajo custodia policial, el hombre de 34 años, paisajista de profesión, sin antecedentes penales, admitió los delitos al declarar que «había violado a sus víctimas después de administrarles alprazolam (un medicamento tranquilizante)», explicó la fiscalía de Montpellier (sureste de Francia) tras confirmar una información del diario regional Midi Libre.
Un hombre en Francia reconoce haber drogado, violado y filmado a unas 15 víctimas
El acusado afirmó «haber actuado de este modo en perjuicio de una quincena de víctimas, entre ellas menores de edad, haber filmado los hechos y haber actuado bajo los efectos de la cocaína», declaró la fiscalía sobre el hombre que quedó en prisión preventiva el 14 de marzo.
Aún poco conocido en los últimos años, el tema de la sumisión química recibió una cobertura mediática sin precedentes a finales de 2024 con el juicio por violación de Mazan, en el que Dominique Pelicot fue condenado a 20 años de cárcel por drogar a su esposa Gisèle y entregarla a decenas de desconocidos que la violaron.
«Luego de tres años de estancamiento deliberado del salario mínimo nacional, el ingreso y el ahorro de las familias ha sido demolido y en su lugar se ha abierto el camino a una agresiva bonificación del ingreso, amparada en la construcción de una narrativa oficial que intenta sustituir conceptos para justificar el despojo de conquistas», manifestó Provea en su cuenta de X.
Según la ONG, para la Administración de Nicolás Maduro el salario «ha dejado de existir, en la práctica y en el discurso» y, aseguró, en paralelo el líder chavista «ha desmantelado la institucionalidad de la negociación colectiva, un derecho amparado en el Convenio 154 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), del que Venezuela es parte».
«Maduro impone un modelo económico opaco, divorciado de los intereses de las grandes mayorías y negador de los derechos de los trabajadores, mediante un aparato represivo», indicó la organización no gubernamental.
Los 130 bolívares de salario mínimo, referencia para el resto de remuneraciones en el sector público, equivalían a 30 dólares en marzo de 2022.
Con información de EFE y Alberto News