Versión Final – Caracas, 6 de mayo de 2023. Para muchas personas el dormir puede significar un verdadero placer, pues con el ritmo de vida tan acelerado que predomina en nuestra sociedad actual, produce que las horas de sueño se reduzcan al mínimo.
Expertos afirman que el sueño es un estado fisiológico, una conducta y una necesidad a la vez, el cual se produce durante el estado de conciencia como producto de la vigilia de todo el día. A pesar de ser algo común, la Organización Mundial de la Salud (OMS), estima que el 40 % de la población mundial padece de algún tipo de trastorno de sueño.
Por esta razón, el descanso no debe estar fuera de prioridades, debido a que está comprobado que una persona saludable mantiene entre 7 y 8 horas de sueño nocturno para regenerar, recomponer, moldear y recuperar algunos sistemas biológicos que han trabajado durante el día.
Diversas investigaciones como la publicada en la revista Neurology, afirman que la falta de sueño podría provocar la reducción del tamaño del cerebro, pues al perderse horas de sueño se reduciría el volumen de la materia gris en ciertas zonas cerebrales. Además, puede contribuir al deterioro de las funciones cognitivas, como la memoria, la atención, el aprendizaje, entre otras, puesto que también se produce una disminución significativa de las conexiones neuronales.
Ante la preocupación que genera los trastornos de sueño y cómo estos repercuten en la salud física y mental, expertos de la universidad de Harvard brindan consejos para lograr dormir mejor por la noche.
Establecer una hora fija para dormir, es una de las primeras recomendaciones, pues al acostarse y levantarse a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana, se ayuda a conciliar más fácil el sueño, ya que la luz del día favorece al establecimiento de patrones de sueño.
De igual forma, los especialistas recomiendan acondicionar el espacio para que contribuya a una mejor calidad del sueño, es decir, la habitación debe mantenerse fresca, oscura y silenciosa, así como sin ningún tipo de distracción, como televisión, computadora o aparatos electrónicos en general.
Si no se logra dormir dentro de los 20 minutos posteriores a estar en la cama es mejor levantarse y hacer algo que proporcione relajación hasta que llegue el sueño nuevamente. También es fundamental evitar siestas durante el día de más de una hora y después de las 3 pm.
Los expertos sugieren evitar la cafeína, pues su efecto suele tardar ocho horas en desaparecer. También se recomienda evitar el alcohol, las comidas copiosas, los alimentos que provocan acidez estomacal y beber mucho líquido durante varias horas antes de acostarse.