Valencia, 19 de septiembre de 2025-. Bajó el flujo de pasajeros entre Venezuela y Trinidad y Tobago. El flujo de pasajeros entre Venezuela y Trinidad ha disminuido notablemente desde el inicio del despliegue militar estadounidense.
De cientos de viajeros mensuales, actualmente solo unas pocas docenas usan los ferris, según operadores locales.
Alana Medina, propietaria del ferri Ángel del Orinoco, afirmó que en junio transportaban 70 pasajeros y en agosto apenas 45.
El ferry del 11 de septiembre atracó en Cedros con solo 15 pasajeros, lo que refleja la caída más fuerte en nueve años.
Medina sugiere que el temor a cierres fronterizos y la tensión bilateral son factores que desincentivan el viaje.
«La situación financiera de la empresa es muy difícil en este momento», destacó la empresaria venezolana.
Bajó el flujo de pasajeros entre Venezuela y Trinidad y Tobago
La disminución de viajeros también ha reducido el comercio en los puertos de San Fernando y Cedros.
Venezuela exporta productos como madera, ropa y calzado, pero actualmente solo dos barcos de carga llegan dos veces al mes.
Hasta 2024, estos mismos envíos se realizaban tres veces por semana, según la División de Aduanas de Trinidad y Tobago.
Entre 2017 y 2024, el comercio bilateral cayó un 56 %, según datos de la ONU.
El empresario Cassian Valdez denunció pérdida de mercancías por extorsión y confiscaciones en Venezuela, lo que obligó a reducir importaciones.
Valdez ahora importa solo el 10 % de madera desde Venezuela y el resto desde Brasil, aunque planea detener completamente los envíos desde Venezuela antes de fin de año.
Consecuencias y perspectivas
El despliegue militar estadounidense y las tensiones políticas han generado un efecto negativo en la conectividad y comercio regional.
Empresas de ferris enfrentan un futuro incierto y comerciantes buscan alternativas en otros países para garantizar sus suministros.