Valencia, 16 de octubre de 2025-. Gobierno de EEUU seguirá cerrado al menos hasta el lunes. El cierre del Gobierno estadounidense se mantiene por falta de consenso entre republicanos y demócratas en el Senado. La cámara entró en receso hasta el lunes sin aprobar el paquete de financiamiento federal.
La propuesta republicana buscaba extender el funcionamiento de la Administración hasta noviembre. Sin embargo, fue rechazada con 51 votos a favor y 45 en contra, cuando se necesitaban 60 votos para avanzar.
Los republicanos controlan 53 escaños en el Senado, por lo que requerían el apoyo de al menos siete senadores demócratas. Solo tres cruzaron la línea partidista: John Fetterman, Catherine Cortez Masto y el independiente Angus King.
Gobierno de EEUU seguirá cerrado al menos hasta el lunes
El cierre del Gobierno estadounidense afecta a miles de empleados federales que permanecen sin salario desde el 1 de octubre.
Además, numerosas agencias han suspendido sus funciones no esenciales, mientras los legisladores buscan un acuerdo que permita restablecer la financiación pública.
El senador Rand Paul, del Partido Republicano, votó en contra de la propuesta de su propia bancada. Argumentó que el proyecto no abordaba adecuadamente los problemas de gasto federal.
La medida habría mantenido abiertas las operaciones del Gobierno hasta el 21 de noviembre, dando tiempo para negociar el presupuesto del año fiscal 2026.
Disputa por los subsidios de salud
El principal obstáculo sigue siendo la extensión de los subsidios del programa sanitario Obamacare, que expiran a finales de año.
Los demócratas defienden su renovación para proteger a millones de beneficiarios, mientras los republicanos los acusan de intentar favorecer a inmigrantes indocumentados.
Ambos partidos se culpan mutuamente por el cierre del Gobierno estadounidense, mientras la población muestra frustración ante la falta de soluciones.
Según una encuesta de AP-NORC, el 48% responsabiliza al presidente Donald Trump y el 45% a los republicanos del Congreso, mientras el 40% culpa a los demócratas.
Aun así, los índices de favorabilidad permanecen estables: 32% para el Partido Demócrata y 40% para el Republicano.