La crisis política en Madagascar ha escalado a niveles alarmantes, convirtiéndose en la amenaza más seria que enfrenta el presidente Andry Rajoelina desde que asumió el poder en 2009.
Este domingo 12 de octubre, el mandatario denunció públicamente lo que calificó como “un intento ilegal de toma del poder por la fuerza”, tras la incorporación de un grupo de soldados a las manifestaciones antigubernamentales registradas en la capital, Antananarivo. El hecho ha incrementado la tensión social y despertado preocupación sobre la estabilidad institucional del país, según informó Noticia al Día.
Las protestas, que comenzaron como movilizaciones pacíficas, se han intensificado con la participación de estudiantes, trabajadores y organizaciones civiles. Los manifestantes exigen la renuncia del presidente y una reforma profunda del sistema político, en medio de denuncias por corrupción y promesas incumplidas de desarrollo económico.
La situación económica ha sido un factor clave en el descontento. El aumento del costo de vida, la pobreza generalizada y la falta de acceso a servicios básicos como educación y salud han deteriorado la confianza ciudadana en el Gobierno. Analistas locales señalan que la unión de miembros del ejército con los manifestantes podría representar un punto de inflexión para la estabilidad política de Madagascar.
Rajoelina, quien llegó al poder tras un golpe de Estado en 2009 y fue posteriormente electo en 2019, ha sido criticado por no cumplir con las reformas prometidas. Su administración enfrenta crecientes reclamos por la desigualdad económica y el deterioro institucional.
La comunidad internacional sigue con atención los acontecimientos. La Unión Africana y la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC) instaron a las partes a mantener el diálogo y evitar acciones que puedan desencadenar un enfrentamiento armado.
Mientras tanto, los líderes opositores anunciaron nuevas convocatorias de protesta en los próximos días, advirtiendo que las movilizaciones continuarán hasta que se escuchen las demandas del pueblo.