Alberto News – Caracas, 7 de marzo de 2025-. El sector financiero en Latinoamérica está evolucionando rápidamente gracias a la integración de nuevas tecnologías que mejoran la interoperabilidad, los pagos instantáneos y las remesas.
La modernización del core bancario es clave para aprovechar estas oportunidades y fortalecer el ecosistema financiero regional.
Según McKinsey, en 2023 se procesaron 3,4 billones de transacciones a nivel global, y se espera que las ganancias por pagos alcancen los $3,1 billones en 2028. En este contexto, la región ha avanzado en la integración de sistemas locales e internacionales, promoviendo la inclusión financiera y la eficiencia operativa.
Cristian Sánchez, vicepresidente de ventas para Latinoamérica de Temenos, destaca que las instituciones deben adoptar infraestructuras tecnológicas escalables para liderar la transformación del sector. En este sentido, existen cuatro áreas clave para la evolución de los pagos digitales en la región:
- Interoperabilidad: La conexión de sistemas de pago locales e internacionales mejora la eficiencia y reduce costos. Las APIs abiertas permiten integrar diversas fuentes de pago, facilitando el cumplimiento normativo y fomentando el desarrollo económico.
- Remesas: La optimización de procesos para transferencias transfronterizas agiliza el envío de dinero y reduce costos, mejorando la experiencia del usuario.
- Pagos instantáneos: Modelos como PIX en Brasil, SPEI y CoDi en México, y Bre-B en Colombia, están transformando las transacciones al procesarlas en tiempo real con solo un número de teléfono.
- Pagos transfronterizos: La actualización de estándares SWIFT y el uso de redes globales de Visa y Mastercard facilitan transacciones internacionales con mayor transparencia y menor costo.
Las instituciones financieras que invierten en tecnología avanzada pueden optimizar costos, mejorar la experiencia del cliente y prepararse para el futuro, impulsando la competitividad y el crecimiento del sector en Latinoamérica.